La Frenda es una tradición ancestral de Santiago de Alcántara. Se trata de un uso social, ritual o acto festivo, relacionada con el ciclo de la vida (las bodas), de la organización socio familiar (entreayuda de familia y
vecinos) y quizás de otros elementos rutinarios relacionados con cosechas u
otros ciclos del tiempo. Dicha costumbre, consiste en llevar de forma vistosa y
organizada, las viandas necesarias para la celebración de un banquete de
bodas, a modo de ofrenda, desde la casa del novio a la de la novia, que será el
lugar donde se celebre el convite.
La víspera de una boda, la familia del novio, enviaba a la casa de la novia, todos los ingredientes necesarios para el convite nupcial. Para ello, se organizaba una «frenda», que era una procesión en la que las jóvenes de ambas familias, vecinas y amigas, transportaban a la cabeza, tableros, cestos, baños, … engalanadas con toallas y paños bordados, en los que llevaban machos cabríos, gallos, gallinas, pan, huevos, dulces, arroz, aceite, ristres de ajo, cebolla, pimientos y tomates, chocolate, jabón de sosa, estropajos de esparto y todos los demás ingredientes para la elaboración del menú. La Frenda era lo que aportaba la familia del novio, y lo llevaban de forma ordenada, vistosa y lucida. La novia aportaba otro tanto, pero no se mostraba en La Frenda, porque el banquete de boda se realizaba en casa de la novia y de sus vecinos.
La Frenda además de ser un evento festivo para todos los santiagueños y habitantes de la comarca, supone un reencuentro vecinal, intergeneracional y cultural, que conlleva actividades durante todo el año. Detrás de una Frenda, había un gran trabajo colectivo de parientes, vecinos y amigos, que contribuían ayudando a las preparaciones o prestando mesas, sillas, platos u otros enseres e incluso ofreciendo sus casas para la celebración del banquete. El espíritu de esta tradición ancestral , de nombre La Frenda es compartir, dar, celebrar, colaborar y ayudar.
La Frenda 